La obra literaria «Madame Bovary» escrita por Gustave Flaubert en el siglo XIX, es considerada una de las obras cumbre de la literatura universal. Esta novela relata la historia de Emma Bovary, una mujer insatisfecha con su vida, que decide buscar la felicidad en amores prohibidos y en una vida llena de lujos y placeres.

Sin embargo, la obra de Flaubert también es conocida por haber generado una gran controversia en su época debido a algunas de las frases y declaraciones hechas tanto por su protagonista, Emma Bovary, como por los demás.

De hecho,  hablando puntualmente de la obra, esta fue juzgada por obscena y por incitar al adulterio y al libertinaje, lo que llevó a su autor a ser llevado a juicio por ofender a la moral pública.

En este post nos adentraremos en las frases más impactantes y polémicas de Madame Bovary, y descubriremos qué fue exactamente lo que dijo este personaje que escandalizó a la sociedad de su época. ¡Sigue leyendo para conocer más sobre esta fascinante obra y su protagonista!

  1. ¿Cómo querías que viviera sin ti? La felicidad crea hábito y luego ya no se puede vivir sin ella.
  2. ¡Qué diablos!, el deber, es sentir lo que es grande, amar lo que es bello, y no aceptar todos los convencionalismos de la sociedad, con las ignominias que ella nos impone.
  3.  «Lo que es lamentable es arrastrar, como yo, una vida inútil. Si nuestros dolores pudieran servir a alguien nos consolaríamos en la idea del sacrificio».
  4. «Como Charles, a causa de sus enfermos, se hallaba fuera casi todo el día, Emma tuvo que acompañarle. Fumaba en el cuarto, escupía en la chimenea y solo hablaba de cultivos, de vacas, de aves; al irse Charles, Emma se sorprendió que dentro de ella surgiera algo parecido a la satisfacción. No ocultaba su desprecio por lo convencional de la vida hogareña, lo cual irritaba un poco a Charles, que consideraba estas opiniones demasiado sigulares y que rozaban, incluso, con lo perverso».
  5. «¡Tengo una religión, mi religión, y hasta la tengo en más que todos ellos la suya, no obstante, sus mojigangas y sus charlatanerías! Adoro a Dios, por el contrario. Creo en el ser supremo, en un creador, sea el que fuere, poco importa, que nos ha puesto sobre la tierra para que cumplamos nuestros deberes de ciudadanos y de padres de familia; pero no quiero ir a la iglesia para besar reliquias y engordar con mi dinero a un cúmulo de farsantes que se alimentan mejor que nosotros. A Dios se le puede honrar de igual modo en medio de un bosque, en el campo, e incluso, como los antiguos, contemplando la celeste bóveda».
  6. «¿Qué puede ser más desolador que la falsa felicidad?»
  7. «Hay un cierto placer en la infidelidad, como en todas las cosas prohibidas.»
  8. «El aburrimiento es la enfermedad del espíritu.»
  9. «Lo que importa no es lo que se hace, sino lo que se siente al hacerlo.»
  10. «El denigrar a los que amamos es cosa que siempre nos aparta un poquito de ellos. No hay que tocar a los ídolos: algo de su dorada capa se queda entre los dedos».

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