Un Bolaño que escribe en la soledad del destierro autoimpuesto. Aquí un compendio de cartas personales enviadas por él a sus padres. En ella se nos muestran los padecimientos y aventuras empredidas por un autor que hoy por hoy es un referente en toda América Latina. Un lujo que solo nos permiten los amigos de Confabulario.

Cartas a sus padres desde Chile y España

Madre amada. Mamá del alma. Motita Pantera Rosa. Estoy en Chile. El viaje en barco bueno rodeado de chilenos que regresaban, unos de Europa La mayoría de Europa, reaccionarísimos, en medio de y blasfemias y maldiciones” contra Allende: “Ese hombre”. Un poco mal mirado (yo) lo que es un halago, porque hasta la cara tengo de bolchevique, de otra forma no me lo explico: cuando me preguntaban si estudiaba o si trabajaba y yo decía, orondo, “Soy EzcritorRRR”, nadie sabía nada: pero aun cuando investigaban en donde se encontraba mi familia “En México”. “¿Y usted que va a hacer a Chile entonces?” “Pues mire, no sé, soy chileno” a los tres días abordo me miraban con miedo o en la comida me decían sonriendo “Que se me hace que usted es de la UP”. “No hombre, cómo” decía yo, aunque al final me declaraba mirista y prometía echarlos a patadas del país.

 

Es hermoso el Mar, es inmenso: uno se siente hormiguita: atemoriza: recordé el fin de una novela pop en que el chavo bueno pero cagadísimo herido en una playa profetiza que se tragará todo un día: yo no lo veo: iba ¡voy! con mucha fe, me acuerdo que llegando a Managua, como a 30 kilómetros de Managua, desperté y vi el cielo lleno de estrellas, no por la ventana, por un ventanuco chiquitito: la escena típica y repetida, pero yo la goze (sic), me puse a reír solo, alzaba el cuerpo y miraba las estrellas, una parecía platillo volador. A propósito. Me entretenía en el barco viendo figuras en las nubes y me puse unos lentes de unos franceses amigos y comprobé la urgente necesidad de comprar unos pronto. Conocí el lago de Nicaragua, casi al entrar a Costa Rica: es bello, bellísimo. Pensaba, pienso, en usted, la más querida, “la más antigua persona que conozco”, en mi papá, en la Mé, en mi Tale, en Jaime, en México, las mexicanas, los mexicanos. El mar es hermosísimo, uno sabe dónde está el Poniente y donde el Oriente, en realidad el Poniente es el Oriente Por allá se tiene que ir uno. ________Trancisión (sic) He comido poca y buena comida chilena, condimentada a (ilegible) y he leído una Antología popular de Pablo Neruda que dan gratis en los liceos y derroché dos lágrimas de cocodrilo, es bueno Neruda, sus versos kozmicos (sic) y de combate____En Panamá “caminé sin rumbo” conocí toda la ciudad, toda, conocí Balboa que es zona del canal, anduve en camiones, sólo dos veces en Taxi, la gente me maravilló. Pero no sé, no me explico Panamá, tengo ideas, en fin, pasan momentos duros, puede venir momentos más duros todavía. ¿Ya te conté lo bonitas que son las costarricenses? En Costa Rica y en Panamá la Lotería es mágica.

Viajé en tren a Colón, Cristóbal está allí mismo, pegado: en un tren juguete por una ruta-camino-de-selva, en segunda, junto con gente DE COLÓN y niños negros de Gamboa y hijos de jamaiquinos meditabundos y alemanes y norteamericanos rubios y antropólogos, sociólogos, que bajan en Frijoles o en otra estación-todas del canal-que se llama más o menos Mr. Hope. Monte Esperanza. Pasé por el Lago Gatún, que es increíble, el tren iba por lagos, a derecha y a izquierda, lagos sucios, empantanados, y lagos limpísimos donde se reflejaba el tren. Lagos inmensos. Y todo en el tren iluminado, eran las 11 de la mañana, mucho sol, y un calor, una humedad que ahora extraño. Are you ready?

 

¡Yes, sir!

 

Tomé el barco en Colón y atravesé el canal al día siguiente. Un camarote con 4 camas, pero sólo lo utilizamos dos: Darío Nosecuanto, de nacionalidad chilena, 19 años, junior Maudit, 18 años vividos en Venezuela, lo mandan a Chile a traficar dólares para su madre que espera hacer la américa y para que se haga hombre y deje de chingar a la gente en Caracas. El muchacho harto tonto no me molestó en lo absoluto, en una casi le rompo el hocico: “de repente me pongo bravo, me pongo charro malvado” No gasté ni un dólar: las muchachas me regalaban cajas de cigarro: terrible, sinceramente: un español con (ilegible) también me quiere regalar una caja: terrible: no leí NADA: No escribí NADA: la comida esquisita (sic): ¡si le pudiera mandar un menú! una de las hijas del capitano: una bellísima italianita, 16 años, medio anduvo bien la cosa, traigo feeling: en Arica se embarcó una linda rubia, chilena, 32 años, eso me dijo, 2 niños, casada desde luego, Adely se llama, padre suizo alemán, votó a favor de Alessandri pero ahora está a favor de Allende, trabaja en una fábrica, secretaria, alta, blanca, delgada, digo alta, de mi porte, ojos azules, simpatía desbordante, todo el mundo mirándola, ella piropeándome, yo piropeándola, “¡poetisa!” “Soñadora” Vacacionando en Arica. Sola. Solita. El aire de mar: almorzamos y comimos juntos tres, casi cuatro, días muy buenos: En la línea del Ecuador (ilegible)  y fiesta en la noche a la que yo no asistí porque no tenia ni traje ni corbata y la misera fiesta fue en 1ª sólo diez personas en 1ª, y las hijas del capitán (tristes)) En Lima perdí mi pasaje en casa de una muchacha venezolana amiga de un compañero de cuarto, al parecer exiliaron a toda la pandilla, por poco después no me dejan entrar en los muelles y pierdo el barco.

 

Desde lejos se ve Viña, donde Quintero, donde una refinería de cobre, poco a poco se agranda la ciudad (la costa la hemos visto dos horas antes) hemos andado viendo costa, el puente se llena de chilenos, todos con las cosas entre la alegría-la sorpresa-y el miedito. Llegamos a las doce del día =NO= a las 4 de la tarde (porque comimos a la 1) Viña y Valparaíso y alrededores, los cerros: una señora dice a un señor “mire, ese es el cerro Placeres” yo le pregunto más y ella me indica Me pongo feliz. El barco no puede atracar (en el cuatro de sept) y nos quedamos en la bahía: Valparaíso de noche esplendoroso: se iluminan los cerros: el día siguiente bajo al puerto sin problemas: que nadie me ayude con los bultos: voy vestido todo de azul: y los tenis sin calcetines; salgo caminando de los muelles: en la aduana todo bien: medio guatean mis maletas y nada más: me voy caminando hasta el tren: reconozco todas las calles: El Monumento a Prat: consignas del MIR: tomo tres horas más tarde el tren y me voy: paro por el liceo, antes por Recreo y Caleta Abarca y “diría que me veo niño y travieso y profundamente hermoso” pero los hermanos son los chilenos: paso por Quilpué: por Villa Alemana: nadie me fue a esperar al barco pero yo fui el más feliz, los estibadores me vieron como un hermano sin exagerar: y el tren con compañero de asiento izquierdista y burócrata (aduanero) y mucha gente parada: parado un muchacho con camisa blanca, medio sucia y jersey sin magas y con un libro grueso, con su muchacha, una chilena bellísima, muy jóvenes ambos, pobres, educados y que me hago amigo de ellos: el buró izquierdo (ilegible) el asiento para (ilegible) al coche y que la muchacha se sienta conmigo (líneas ilegibles) …había que verlos: lindos los dos: ¡frescos! y en Quillota les ofrecí unos y ellos parece/tenían hambre y me lo aceptan LLENOS DE SONRISAS: antes por ejemplo, en Villa Alemana creo, me compré un zanguiche (no torta) y ellos se compraron uno y lo partieron por la mitad, mitad para cada uno: y el muchacho venía fumando y para comerse el zanguiche apagó el cigarro y luego volvió muy satisfecho a encender el pichito porque escasea el cigarrillo y entonces ahí se me acabaron unos Dunhill que me habían regalado en el barco y que ellos jamás fumaron DURANTE TODO EL TRAYECTO EL MUCHACHO ME OFRECIÓ SUS HILTON SIN EL MENOR ASOMO DE SUFRIMIENTO CON GRAN BONDAD! Me sentí igual que Cardenal cuando fue a ordenar sacerdote, así amor. Puro amor, riéndome, literalmente, de verdad, carcajeándome de amor, celebrándolo: y en una subida, creo que antes de llegar a LLAY-LLAY, después de una subida, en una especie de pequeño precipicio, EL TREN SE PARA y todos sacamos las cabezas a ver que paso tan taran tan: la locomotora se ha desenganchado del tren y ha seguido sola: si eso nos pilla en la subida no estaría escribiendo esta carta ahora. En fin, toda una odisea, una Ulisea y llegué a Santiago.

 

Y a la cara de Jaime quien me hizo, pestañeo, como si yo fuera un aparecido, un fantasma, chicos ojotes peló. Salimos al centro inmediatamente: todo se me figuraba congestionado: habían dos mítines: uno con mujeres a favor de Allende y otro de mujeres en contra: tremendo: peleas en las calles: gases lacrimógenos (¡lacrimogeno!) fuertísimos. En un mitin gente de pueblo, gente. En el otro la clase media y la burguesía EN PLENO, fue más grande que el de Allende porque éste había tenido una manifestación gigantesca el día anterior. Nos metimos por el medio. Toda la gente transita. Casi es normal. De repente gente que corre por las calles y uno se va por el lado contrario y correr por aquí y uno se aleja y por la otra calle corre más gente y uno busca una salida y gente que corre y uno siente (ilegible), al menos el primer día! ATRAPADO. La ciudad me persigue. Cascos por una esquina: tac tas que vienen a atacar a las mujeres de Allende de la UP y cascos rojos por otra esquina Juventudes Socialistas o Comunistas o Miristas o del Mapu que están ahí para defenderlas y carabineros armados hasta los dientes que están ahí para impedir el choque: luego fuimos al Centro de Arte A: me deprimen los artistas: me deprimen: vimos una exposición de pintura (líneas ilegibles) Estaba el poeta Lamberg ganador del último premio Casa de las Américas, Jaime me lo presentó, un veterano desabrido, muy Pepe de Rokha, el estilo, terrible, pero también ocurrió algo lindo: en una bajo a la calle, aburrido de tanto ARTE y hay un muchacho que luego me enteré hace cine y una muchacha que venía del centro (en realidad estábamos en el centro) que protestaba contra las bombas y los disturbios: era ES bellísima: de izquierda: decía “mierda de (ilegible)” “Mierda de provocadores” No sé: pensé que era una lola: pasaban escuadrones de niños del PN. con caras felices, con sus palos, niños de 13, 14, 15, 17 años: hablamos: me preguntó si yo era extranjero (en realidad todos me preguntaron si era extranjero, No hablo como chileno) hablamos: le dije “como te llamas?” ella “Verónica” silencio, ella “Tú cómo te llamas?” “Ro-ber-to” ella pensativa “Roberto” Hablamos, yo daba diente con diente del frío diente con diente, si  eso yo hacía, en un monte pelado, la (ilegible), deveras (sic) daba diente con diente, el frío es inaguantable TREMENDO. Y de repente La Lola Magnífica Reina de TODAS LAS CALLES Y LA REVOLUCIÓN dijo adiós- chao y beso en la cara al chavo cineasta: segundo de tristeza (ilegible) en mi corazón: ¡¡ Y luego a mí y me dijo chavo y sentí su piel helada en mi cara y sus manos en mi chaqueta y me/podría decirlo/ serlo/ quien sabe/ ENAMORE!!  Verónica Me decía el corazón en las manos los dedos del pie y ella se iba NUNCA MÁS la iba a ver la buscaría por todo Santiago Me moría de frío: caminó media cuadra y entró a un edificio: que suerte más loca loca loca!! loquísima suerte. Un día de estos voy y hablo con ella y nos hacemos amigos: el cineasta me dijo que vive en el primer piso: mañana voy o pasado mañana. No sé. Voy a ingresar en las Juventudes Comunistas. A veces me gana un odio loco por todas las cosas, todo lo veo egoísta, yo el principal. Me angustio “Me desespero” (suena a telenovela) tengo pocas defensas: mi salvación es la literatura: No el oficio mediocre de fiestas, firmas, universidad, recitales de los escritores desarrollados o por ahí “ni la mariguana total de los “escritores “ “subdesarrollados” feudales=vasallos Me desoriento, pero tengo voluntad: espero tener voluntad de Acero: tengo que militar: por la calle veo un desfile de la JJCC, enterrando a un camarada muerto (15 años) todos con camisas rojas, muchachas muy lindas, lolos con cara de pendejos o cara de pendejo: echaban porras esos imbéciles: pero algunas niñas de verdad emocionadas lloraban: estaba bien: de ahí fui a donde Mónica Montoya: vive en un barrio popoff: caminé como 50 cuadras cuando menos: una (ilegible) legua ver a Mónica, que está más gorda (antes era flaquísima) ella también se alegró: muy a favor del gobierno, muy entusiasta, me invitó a comer el domingo, fui a comer: Silvia está casada: muy bien, igual que hace 5 años, conocí al marido y es simpatiquísimo: en fin. Mónica vive sola a Bilbao y trabaja como profesora: comimos sólo un plato de porotos: terrorismo burgués la inutilidad culinaria (gastronómica) porque el desabastecimiento es fuerte, pero no tanto, la cuñada de Jaime que es más pobre y tiene niños cocina bien. Mónica es dulce, me ofreció la casa de sus padres en los Angeles. no es mala idea vivir en los Angeles. Es posible que el Partido me consiga trabajo Los Angeles en la ciudad mas reaccionaria de Chile, tendría hasta acción (bRRRRRR) viéndome aun soy valiente.

 

A usted la amo. A mi papá, saludos y va carta, a la Mé saludos y va carta, a mi Tate ni la ve saludo y va carta. En MENOS de un año nos volveremos a ver. Uno nunca esta solo. Chile es bello. Saludos a Marta a todos en México cuídense, vayan al Médico, ahorren. Ya no fumo. Mi salud es optima. Mucha fuerza. Dejé de fumar, vencí el asma.

Lee todas las cartas en: http://confabulario.eluniversal.com.mx/mi-salvacion-es-la-literatura/

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